Cada año la misma historia, en enero empiezo con el ejercicio en enero, en enero empiezo la dieta, espera no…mejor después de reyes…¿te suena?. ¿Esta historia se repite una y otra vez en tu vida?. Es bastante común, pero se puede evitar, y te voy a dar una serie de consejos que te pueden ayudar.
¿POR QUÉ LO HACES?
Uno de los motivos por lo que estos planes exprés fracasan, es porque los hacemos sin pensar. ¿A qué me refiero con esto?. Dar un cambio tan importante y significativo en tu vida, requiere de una fuerte motivación, si no, con los primeros obstáculos que surjan vas a dejarlo de lado.
Hacer ejercicio o ponerte a dieta no es fácil, especialmente si nunca lo has hecho. Por lo que vas a necesitar ponerlo como una prioridad en tu vida.
Piensa en porqué lo haces, qué beneficios va a traer en tu vida, qué cosas vas a poder hacer que ahora no puedes, cómo va a mejorar tu salud, tu autoestima, etc.
Y si no lo sabes, aquí te dejo yo una lista de buenas razones por las que comenzar con el ejercicio, según la OMS:
- La actividad física tiene importantes beneficios para la salud del corazón, el cuerpo y la mente.
- La actividad física contribuye a la prevención y gestión de enfermedades no transmisibles, como las enfermedades cardiovasculares, el cáncer y la diabetes.
- La actividad física reduce los síntomas de la depresión y la ansiedad.
- La actividad física mejora las habilidades de razonamiento, aprendizaje y juicio.
- La actividad física asegura el crecimiento y el desarrollo saludable de los jóvenes.
- La actividad física mejora el bienestar general.
- A nivel mundial, 1 de cada 4 adultos no alcanza los niveles de actividad física recomendados.
- Se podrían evitar hasta 5 millones de fallecimientos al año con un mayor nivel de actividad física de la población mundial.
- Las personas con un nivel suficiente de actividad física tienen un riesgo de muerte entre un 20% y un 30% menor en comparación con las personas que no lo alcanzan.
Si esto para ti no es suficiente, es que tienes que aprender a quererte un poco más, tu salud mental y física lo agradecerá.
¿CÓMO LO VAS A HACER?
Esta parte suele ser la mejor de todas. Pongamos que hemos decidido comenzar con el ejercicio, ¿ahora qué, por dónde empiezo?. Pues como todo en esta vida, vamos a buscar en internet a ver qué dice.
En internet podemos encontrar gran cantidad de información buenísima, pero el problema es que también hay mucha información nefasta, y si no sabemos de un tema es muy complicado saber filtrarla.
Otra opción es apuntarnos a un gimnasio. Cada mes de enero, los socios habituales de gimnasio, asistimos al espectáculo de las cuotas exprés. Esto consiste en apuntarte el 7 de enero (después de reyes claro), y desapuntarte en marzo cuanto te das cuenta de que te siguen pasando la cuota del gimnasio por el banco y has ido 2 veces.
Esto es normal, y si a ti también te ha pasado no te preocupes. Puede resultar muy frustrante llegar a un lugar donde nunca has estado y ver a un montón de gente muy fuerte y que sabe entrenar muy bien (o al menos eso parece).
Como no sabemos muy bien lo qué hacer, vamos a los monitores, y nos dan una tabla estándar para que vayamos haciendo algo. Pero pronto nos damos cuenta de que no sabemos hacer los ejercicios y no estamos mejorando nada. El día que mi amigo no va al gimnasio yo tampoco voy, y cuando me sale un plan mejor también lo cambio por el ejercicio.
Puede que este no sea tu caso, puede que tú un día decidieras empezar, te lo tomaras en serio y en cuestión de meses o años hayas conseguido aprender a entrenar por tu cuenta, si este es tu caso, ¡enhorabuena!, no necesitas seguir leyendo.
Pero si no lo es, y te encuentras frustrado por cambiar tu salud y tu físico, creo que puedo ayudarte.
BUSCA PROFESIONALES
Parece que quiera venderme pero no es así, no te voy a decir que entrenes conmigo. Pero sí te voy a decir que busques ayuda PROFESIONAL. Y profesional no es tu cuñado que lleva 2 años jugando a pádel y parece en forma, o ese video de youtube de esa chica que está muy fuerte y algo sabrá. Profesionales somos las personas que nos dedicamos realmente a cuidar de la salud de las personas a través del ejercicio físico o los nutricionistas que pueden ayudarte con una dieta personalizada.
Quizá pienses que es muy caro, pero tienes que verlo como una inversión. ¿Cuánto dinero pagarías por estar fuerte y sano?. Esto no es como un móvil que lo compras y ya está. Tu cuerpo requiere de un proceso de cambio a largo plazo, y para ello debes hacer una inversión de tiempo, esfuerzo y por qué no, dinero.
Si quieres ahorrarte meses de estar dando vueltas por el gimnasio sin saber que hacer o probando todas las dietas que encuentres en internet, busca ayuda profesional, de verdad que no te vas a arrepentir de invertir en tu salud.
OTROS CONSEJOS ÚTILES
Después de la experiencia que tengo a lo largo del tiempo con mis clientes te voy a dar una serie de consejos que pueden serte útiles:
– NO TE MIENTAS A TI MISMO: Hay personas que se engañan a sí mismas poniendo un montón de excusas para no hacer ejercicio y las ven como algo totalmente lógico. Claro que va a haber cosas importantes por delante, pero deja de mentirte y ponte a trabajar.
– NECESITAS PONERLO COMO UNA PRIORIDAD: Si para ti esto no es importante, lo vas a dejar. Si no tienes tiempo ahora para cuidarte, piensa en que más adelante necesitarás tiempo para médicos, rehabilitaciones, enfermedades, etc. Así que hazte un favor a ti mismo, y cuídate.
– NO QUIERAS HACERLO TODO DE GOLPE: No cambies todo de golpe, bastante difícil es ya empezar. Empieza poco a poco, con pequeños cambios, pequeños logros, y poco a poco ve aumentando, de esta forma es mucho más fácil que lo consigas.
– SI TIENES ALGO EN LA MENTE QUE TE IMPIDE CAMBIAR, LO PRIMERO QUE NECESITAS TRATAR ES ESO: Veo cantidad de personas que se encuentran atascadas en algún proceso mental que no les deja avanzar. El ejercicio puede ayudar a esto, pero si tienes algo en la mente que no te deja avanzar, empieza por resolver eso y todo será más fácil.
– NO LO LLEVES EN SECRETO: Necesitas que tu entorno colabore con estos cambios. Rodéate de personas que sumen y no que resten. Si tu amigo no entiende que necesitas ir al gimnasio y tienes que quedar más tarde, no es tu problema, es el suyo. Si tu familia no entiende que quieres llevar una dieta más equilibrada es su problema, no el tuyo. El entorno va a ser fundamental en esto, por lo que te recomiendo que informes a tu familia y amigos para que puedan ayudarte y no ponerte las cosas más difíciles.